DIANA ALVARADO 20 MARZO 2020.- La senadora por Quintana Roo Marybel Villegas Canché respaldó a favor en Tribuna diversas reformas en materia de Bienestar Animal, en el que se establece la prohibición del uso de animales en pruebas para productos cosméticos.
Villegas Canché explicó que “la reforma modifica la Ley General de Salud, los artículos 272, 414 bis, 421 y la fracción VI del artículo 425; y se adicionan un tercer párrafo al artículo 270, recorriéndose los subsiguientes, un párrafo al artículo 271 Bis y una fracción VI Bis al artículo 425 y se reforme el artículo 4 y 105, fracción VII; se adicionan un segundo, tercer y cuarto párrafos a la fracción II del artículo 20, todos de la Ley Federal de Sanidad Animal”.
“La experimentación con animales ha sido uno de los temas más debatidos en la actualidad entre las organizaciones civiles y las industrias que utilizan este tipo de métodos. Gobiernos de todas las tallas y estilos en el mundo han tratado de abordar el tema sin mucho éxito, debido a que las presiones de ambos grupos de interés no han cedido sobre sus posiciones, poco se ha hecho sobre un tema donde la ética y la moral luchan frecuentemente por salir a flote en un asunto de corte público”.
“Actualmente se estima que 115 millones de animales en el mundo son utilizados en laboratorios para la experimentación; la industria cosmética mexicana ocupa el tercer lugar en producción, después de EE.UU. y Brasil, y es equivalente a 10 millones de dólares, ocupando el lugar número 11 en el mundo. Además, registra un crecimiento de cuatro por ciento al año.
“En nuestro país contamos con la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, la Ley General de Salud y la Ley Federal de Sanidad Animal, a nivel de norma oficial mexicana contamos con la NOM-062-ZOO-1999, la cual establece las especificaciones para la producción, el cuidado y uso de animales de laboratorio. Es la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, la encargada de supervisar y aplicar esta normativa y aunque existen múltiples y muy diversas leyes y marcos normativos locales que buscan proteger el bienestar animal en muchas de las entidades federativas, los esfuerzos han sido poco contundentes, provocando que no se audite eficazmente y sancione las prácticas de crueldad y mala conservación”.
“El Estado Mexicano debe considerar que aunque el avance científico es muy importante para el bienestar de la humanidad y el progreso de las naciones, no debe implicar el sacrificio y sufrimiento de la vida misma”.
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