Por Adriana Olvera
La historia la va dictando el antes y el después y, la llegada de tiempos electorales siempre son un buen indicador de lo que se hecho y dejado de hacer. El Playa del Carmen de hace 15 años es como una fotografía de antaño, en extremo diferente a lo que es hoy, donde lo único que no ha cambiado es el esplendor del color turquesa del mar. Esas tonalidades son como un faro que ha atraído a turistas de todo el mundo, a pesar del daño ambiental resultado del crecimiento de la ciudad.
Por mencionar solo uno de los pocos lugares emblemáticos que han sobrevivido al paso del tiempo está el club de playa “Zenzi Bar”, en la calle 10. Sitios como este aún se guardan en la memoria de los playenses que se quedaron e hicieron vida en el corazón de la Riviera Maya. En este acceso al mar, entre el rompimiento de la ola y los escasos metros de playa, hay un registro de drenaje, que hace 15 años no existía: es una mole de concreto con tapa metálica, de casi dos metros de diámetro y lo mismo de altura, exudando hediondos olores del sistema de drenaje de la ciudad, que se mezclan con el propio del sargazo.
Este registro es testimonio claro de cómo la erosión, el calentamiento global y factores como la gobernanza han dado como resultado que nuestras playas queden reducidas, al grado que ya han alcanzado al sistema de drenaje de la ciudad.
Si bien han existido intentos por retirarlo y hacer las modificaciones necesarias para que turistas no miren con menosprecio las playas del Caribe Mexicano, hoy este “monumento” sigue de pie. No bastan las 6 certificaciones Blue Flag que Playa del Carmen ha conseguido; eso habla de trabajo hecho, pero también de lo que no se puede dejar de hacer. Aquí hay una clara tarea para dar seguimiento y no permitirle al tiempo que la fotografía del horizonte en Playa del Carmen se ensucie con un registro de concreto.
Las promesas de los políticos no cambian. Esperemos que la fotografía de Playa del Carmen no se vuelva sepia y que ya nadie recuerde lo que fue alguna vez. Que nuestros testimonios escritos hoy sirvan como empuje para generar voces que reclamen por mantener la hermosa imagen de nuestra ciudad; que las remodelaciones hechas a la Quinta Avenida y plazas principales no sean la excusa para el desvío de recursos. Playa requiere corazón. Si bien ya no es lo que fue, aún le queda mucha belleza que debemos cuidar.
#PeriodistasDePlayaDelCarmen
*Periodista independiente, egresada de la UNAM, con especialidad en Comunicación Política, fanática del buen cine, la música y las mejores comidas.
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